Titulo: The Apartment
Año: 1960
Duracióin: 125 minutos
Director: Billy Wilder
Guion; Billy Wilder
Musica: Adolph Deutsch
Fotografia: Joseph LaShelle
Reparto: Jack Lemmon, Shirley MacLaine, Fred MacMurray, Ray Walston, Edie Adams, Jack Kruschen, Joan Shawlee, Hope Holiday, David Lewis, Naomi Stevens, Johnny Seven, Joyce Jameson, Willard Waterman, David White, Edie Adams
Sinopsis:
C.C. Buxter es un ambicioso empleado de una firma de seguros de Manhattan. Es soltero y vive solo en un discreto apartamento que presta ocasionalmente a sus superiores para que se encuentren con sus amantes; él confía que los sucesivos favores le sirvan para mejorar su posición en la empresa."Una Oda a la Magnificencia"
El Blog también se encargará de realizar una cierta mirada al cine clásico publicando estos espacios dispuestos a otorgar un criterio de aquellos film que quedarán para siempre en el recuerdo eterno de la historia.
Hace unos días vi por segunda vez este film y no comprendo cómo es posible que este señor Billy Wilder puede hacer este tipo de películas, es que decir perfecto es muy poco para describir la magnificencia del mejor guionista de la historia del cine y uno de los mejores directores que existen han existido y existirán. Esto no es una película, es todo un canto al cine, toda una alegría a los sentimientos, todo un oceano de las emociones, toda una oda a la perfección.
Muy aparte de ser una comedia, es el guión, sus actores, su increíble dirección la que le da vida a este agridulce cuento se podría decir así, el cual es además un reflejo social de Nueva York en la década de los ´50 y ´60.
La película nos trae diversos temas, desde una crítica al sistema de trabajo que se manejaba en ese entonces, mucho de lo cual aun existe en nuestro tiempo, introduciéndonos de esta manera en los enredos de un contador muy peculiar el cual utilizará los recursos que sean necesarios para ascender en su posición sin prever las consecuencias de sus actos. Durante el metraje nos identificamos directamente con C.C. Buxter, al cual dará vida el siempre magnifico Jack Lemmon y mientras realiza el particular juego de prestar su departamento para los ejecutivos de la empresa del trabajo, este personaje es testigo de la metamorfosis que su estilo de vida repercute en su persona y en aquellos que lo rodean.
Ingeniosamente el magnífico Wilder, imprime sus páginas de forma que en cada mínimo segundo del metraje sea un desborde maestría por doquier, es capaz de hacernos sentir la soledad real del protagonista, de regocijarnos y emocionarnos cada vez que Shirley MacLaine atraviesa caminando por uno de los pasillos o en el interior de su inquietante ascensor, sin mencionar que la química que se forma entre los dos protagonistas es por no encontrar otra palabra “celestial”, maneja perfectamente las situaciones dramáticas, cómicas, argumentando todo el contexto de forma tal que hasta la persona menos interesada en este tipo de cine quedará maravillado ante el resultado.
Con cada escena Wilder logra todo un mar de emociones y sentimientos, combina a la perfección su tan reconocida y típica forma de tratar el humor: acido, inteligente, audaz y cínico (que siempre han caracterizado sus obras); con la diversa tonalidad de elementos melodramáticos y toques amargos, lo que termina por crear una de las mejores historias que el septimo arte ha concebido desde que se creó.
Solo bastan los primeros minutos del metraje para inundarse en la obra, los músculos se inmovilizan, los huesos se quiebran, es absorbente desde principio y te mantiene sofocado hasta los últimos segundos del film, de verdad es delirante y enfermiza la forma como atrapa este increíble guión.
Jack Lemnon simplemente no podía lograr algo mejor, su personaje es completamente el reflejo del ser solitario, buscando oportunidades de vida, su actuación es sencillamente Magistal, borda uno de los mejores personajes que se han creado en la historia del cine. Shirley MacLaine brilla por todo lo que hace, por lo que es, y por lo que logra en la película, es imposible no enamorarse perdidamente del personaje que interpreta, encantadora, adorable, respira frescura a cada momento. El Resto de personajes secundarios también forman parte de la historia, todos excelentemente interpretados.
La puesta en escena es perfecta en todo momento, en cuanto al apartado técnico pues una autentica y bella fotografía acompaña a nuestros personajes, mientras la banda sonora y su perfecto montaje, juegan sus papeles necesarios para completar el rompecabezas.
El Apartamento no es una Obra Maestra, es mucho más que eso, perfecta, completa, increíblemente actuada, soberbiamente dirigida, es toda una oda a la magnificencia, ni el más mínimo pixel de la pantalla está libre de la perfección del mago Wilder (es un maldito genio: Sunset Boulevard, El Apartamento, Testigos de Cargo, Con faldas y a lo loco, Dias sin Huella, Perdicion, Sabrina, entre otras), y es que es Billy Wilder con su maestria tras camaras el que hace posible esto.
Ya no se hacen películas de esta magnitud, menos mal en su momento existieron y es todo un privilegio visionarlas. Recibió 5 premios de la academia incluyendo, película, director, guion original, dirección artística y montaje, film que ya forma parte de las mejores películas de la historia del cine.
Esto no es una película; esto es arte, esto es entretenimiento, esto es comedia, esto es humor, esto es drama, esto es sensibilidad, esto es ternura, esto es amor, esto es calidad, esto es belleza, esto es alegría, esto es grandeza, esto es cine…
Lo Mejor: ¡¡TODO!!
Lo Peor: ¡¡NADA!!
Nota: *****15/10*******